martes, 27 de octubre de 2015

Miedo al compromiso



¿Cuales serían las razones que pueden llevar a algunas personas  a huir de una relación en el momento en que se están enamorando?
Esta pregunta requiere una respuesta compleja. Las razones pueden ser muy variadas.
Primero que todo, hay  que tener en cuenta dos factores, lo social y lo individual. En cuanto a lo social, nos encontramos en una época donde la soledad no tiene tan mala prensa como antes. Ahora hay una sobrevaloración del hecho de estar solo o ser single como se les nombra a los solteros. Los singles, algunos por elección otros por cuestiones de vida, priorizan el desarrollo de lo personal, lo laboral, por sobre el hecho de tener un proyecto de pareja. Hay todo un mercado que gira en torno a ellos. Por lo cual los singles están dentro de un circuito muy satisfactorio.
Somos parte de  una época hedonista, donde se busca el placer propio y las cosas se descartan cuando no funcionan.
Entonces estar solo, promueve un mundo de sensaciones: viajar, salir, experimentar, desarrollarse profesionalmente.
Teniendo en cuenta esto, una pareja puede verse como una amenaza ante todo lo bueno de la soltería. Muchos relegan tener una pareja porque temen perder lo alcanzado cuando estaban solos. Aquí es donde se entrecruza lo individual. Una persona puede tener muchas razones, concientes y otras inconcientes, para huir cuando empieza a armar una relación profunda con otro. Una persona está influenciada por su historia. Por su crianza, por sus vínculos anteriores. Esto respondería a grandes rasgos, cuáles serían los factores por los cuales alguien huiría de una relación. Las razones, pueden ser muy variadas. Temores concientes, inconcientes, superficiales o más profundos. Pero sea una cosa o por otra cuando hay una huída es porque el sujeto detecto una amenaza, que puede ser a perder su autonomía, placeres de la vida, libertad, como así también el temor a enamorarse y ser abandonado, con todo el sufrimiento que eso conlleva, y la huida vendría a evitar dicha situación. De la mano con esta idea es, el temor a darse a conocer profundamente por el otro, con la creencia inconciente que si lo conocen de verdad no lo aceptarían y serían rechazados.
Es más complejo de lo que parece, pero para hacer una lectura más acertada, hay que tomar en cuenta como mencioné anteriormente, lo social y lo individual.
Más alla de esto, también debemos pensar que el ser humano, es ante todo un ser social, y que logró evolucionar gracias al contacto con el otro.
Tener la posibilidad de comenzar una relación de pareja no debería ser vivida como una amenaza, sino como algo que puede enriquecer nuestra vida. Se trata de lograr un sano equilibrio entre la vida individual y la vida de a dos.

viernes, 20 de febrero de 2015

El problema del desempleo: “Por más que lo intento no consigo trabajo”


El trabajo es salud, dicen. Y algo de cierto hay en la sabiduría popular.
Trabajar nos hace sentir bien, nos da motivos para levantarnos, nos vestimos adecuadamente. Nos da un orden, una rutina. Nos incluye dentro de un grupo. Nos ofrece amigos. Y nos da la retribución del dinero, aunque como estamos viendo, no es lo único. No solo se trabaja por plata. El trabajo genera un montón de sensaciones e incide en nuestro estado anímico, generando malestar o bienestar.


Es muy común escuchar la queja de “Por más que lo intento, no consigo trabajo”, “fui a un montón de entrevistas y no quedo” o “ no me llaman para ninguna entrevista”.

Un desempleado es aquel sujeto que forma parte de la población activa (se encuentra en edad de trabajar) y que busca empleo sin conseguirlo.
Cuando sucede esto, podemos atribuir dicha situación a diferentes factores: sociales y personales.
Tener en cuenta la situación del país, sobretodo de nuestro país, no alcanza. Siempre hay algo que nosotros podemos hacer para salir adelante. Hasta en el año 2001 donde parecía que estaba todo perdido, apareció el trueque y la cosa siguió adelante.
Cuando pasa siempre lo mismo, cuando buscamos una y otra vez, sin conseguir lo que esperamos, es ahí donde debemos detenernos y pensar. Y es ahí es donde empieza nuestra responsabilidad.
¿Qué es la responsabilidad? Hacernos cargo de lo que nos pasa. ¿ qué tiene que ver uno mismo en lo que le pasa? Es la gran pregunta que hacía Freud a sus pacientes, y que hoy en día nos sigue sirviendo para avanzar en nuestra vida.
Uno de los principales motivos por los cuales una persona no consigue trabajo, es ella misma. ¿Parece obvio no? Pero no todo el mundo puede verlo cuando surge este problema.
Podemos pensar: ¿cuanto tiempo le dedicás a la búsqueda laboral? ¿La tomás como a un trabajo? ¿Hacés un filtro muy minucioso a la hora de buscar empleo? ¿Pensás que no coincidís con ningún perfil de búsqueda?
Muchas veces lo que hay por debajo de una búsqueda laboral sin resultados positivos, es una mala búsqueda, una muy baja autoestima de la persona en cuestión, a veces aspectos depresivos en juego, como el desgano y el no esfuerzo. Todo esto puede revertirse.
Es importante detectar esto y hacerse cargo de la vida de uno.
Detenerse y pensar.
Y si hay muchos aspectos tuyos que no te gustan, es momento de dedicarle tiempo para mejorar. Por ejemplo: mejorar tu apariencia física, mejorar tu nivel de computación, mejorar tu nivel de inglés. Mejorar tu calidad de vida, si estás pensando en un trabajo que requiera esfuerzo físico, como los trabajos rurales o la vida de los viajantes. Cuidar tu salud. Siempre hay cosas para hacer.
Siempre podés pedir ayuda. Desde ayuda profesional. Hasta ayuda a tus amigos o conocidos para que te hagan el contacto con una persona que te de trabajo.
Lo importante es aprender a observar la propia conducta y hacerse cargo de lo que a uno le pasa para salir adelante.